-Mierda.
-¿Crees que a mi me apetece hacer todo esto?, ¿piensas que no estaría mejor pensando en otra persona y no en ti?, ¿sabes que tengo algo de verdad que se llama amor, y no va contigo?
-Mierda, porque tengo una mancha en el pantalón. Pero gracias por la declaración de intenciones.
Silencio.
-No dependo de ti, ¿sabes?
-Ya.
-En serio, cuando yo quiera, me despediré de ti y no te volveré a ver. Porque para mi no eres nada. No vales nada. No te quiero.
-Yo tampoco.
-¿Cómo que no me quieres? Tu sí que me quieres. Me lo has dicho miles de veces.
-Pero porque tu me lo decías a mi.
-Entonces no sientes nada por mi.
-No, no te quiero, pero me encanta follar contigo. Eso se llama atracción física, cielo.
Silencio.
-Sé que estoy buena.
-No, no estás buena. Eres follable. Y qué más puedo pedir si con dos palabras de mierda te tengo mirando pa' Cuenca.
-Se acabó.
-¿El qué?
Silencio.
Miradas inquisitivas.
-Demasiado hablar, vamos a follar.
-Amén.
Uuuuuuuuuhú!
*
Subscrever:
Enviar feedback (Atom)
Sem comentários:
Enviar um comentário
tes algo que dicir... seino...